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Alfredo Saavedra: Diseñar el proyecto del mundo

por Julian Monti

Escriben y entrevistan Cristina Mateu y Julián Monti

La Marea visitó en su casa al reconocido diseñador gráfico Alfredo Saavedra, quien en una larga conversación recorrió su trayectoria profesional, su trabajo en la docencia y su comprometida militancia al servicio de diferentes causas populares.


El nombre de Alfredo Saavedra está indefectiblemente asociado al diseño gráfico. Reconocido y respetado por sus colegas y por los miles de jóvenes que desde 1984 se han formado en la carrera que se dicta en la Universidad de Buenos Aires, es –sin embargo– el autor anónimo detrás de innumerables imágenes y marcas, tanto de empresas –estatales y privadas– como de organizaciones sociales, políticas, de derechos humanos y culturales; sin ir más lejos, el logo que identifica a nuestra revista La Marea es un diseño suyo, que generosamente y sin afán de reconocimiento aportó a este proyecto en sus inicios.

A pesar de la pandemia, tuvimos la suerte de que Alfredo nos recibiera en su casa, en el barrio de Congreso, en la Ciudad de Buenos Aires. No sin cuidados, pero muy afectuosamente, conversamos largamente acerca de su formación como artista, de sus inicios como diseñador, de la docencia, de la carrera de la UBA –de la que fue fundador–, de su compromiso y su militancia, entre muchas cosas.

En esta primera parte de la entrevista, Alfredo Saavedra habla de su formación en las escuelas de bellas artes, de sus primeras luchas estudiantiles y de sus inicios como diseñador de afiches para el teatro oficial de la Ciudad de Buenos Aires.

“Antes que nada, me presento como docente”

La trayectoria de Alfredo Saavedra como diseñador gráfico es difícil de abarcar; la sola enumeración de sus trabajos más importantes ocupa varias páginas de su currículum vitae. Sin embargo, él prefiere definirse como docente. Es en la docencia donde, según él, ha puesto la mayor parte de su energía a lo largo de más de 30 años, haciendo de ésta una parte importante de su militancia.

Además, por la profundidad de sus ideas y por la claridad con la que las expone, es evidente que la docencia es la actividad que le ha permitido elaborar y sintetizar sus concepciones acerca del arte, del diseño y de la cultura en general.

En esta segunda parte, además de hablar de su militancia en la docencia, Alfredo Saavedra nos habla de las conexiones entre el arte y el diseño a lo largo de la historia, y cuestiona la idea de que el arte no debe tener compromiso.
Un afiche de Alfredo Saavedra que fue tapa de la revista Síntomas.
Los orígenes del diseño se remontan, según Alfredo, al libro, aunque la identidad visual de las cosas nace en el trabajo.

Arte, diseño y universidad

Siendo ya un diseñador gráfico reconocido y habiendo realizado numerosos trabajos en el ámbito estatal y privado, así como una cantidad de aportes a distintas causas sociales, políticas, de derechos humanos, Alfredo formó parte del grupo de artistas, arquitectos y diseñadores profesionales que en 1984 fundaron la carrera de diseño gráfico de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo (FADU) de la UBA, probablemente la más reconocida y de mayor prestigio entre las carreras de diseño de Latinoamérica, y donde se formaron –según él– los mejores profesionales del país. Dentro de ella, Alfredo fue titular de cátedra de la materia troncal durante más de 30 años.

Dada su formación inicial, Alfredo imprimió a su cátedra un carácter artístico, que abrevaba en las manifestaciones visuales de toda la historia del arte, frente a otras propuestas más “profesionalistas”, que se orientaban más a la publicidad y aplicaban modelos más estrictos.

Aquí Alfredo habla de las dos tendencias principales que existían en el comienzo de la carrera en la FADU, de cómo fue su desarrollo en el tiempo, y del lugar que ocupó su cátedra.

Su compromiso y sus luchas

En la década de 1990, cuando la Argentina se insertaba en la llamada “globalización” y se privatizaban las empresas estatales mientras penetraban fuertemente los monopolios extranjeros, hubo una explosión de la publicidad y del diseño gráfico en nuestro país. Alfredo trabajó en varios proyectos publicitarios, pero siempre desde un lugar crítico, ya que nunca sintió que ese fuese su lugar, y finalmente abandonó ese camino, a pesar de que –como él mismo afirma– “podría haber terminado millonario”.

Él prefiere rescatar otro tipo de actividades, en las que no priman el mero afán de lucro o la firma individual. Junto a otros artistas y diseñadores, Alfredo sigue siendo –como en sus inicios– un consecuente luchador por los derechos humanos, por la defensa de los bienes comunes, por los derechos de las mujeres, y tiene una participación activa y permanente, aportando su creatividad al servicio de esas causas.

Aquí, Alfredo habla de la enorme influencia de la publicidad y de los grandes medios de comunicación en la difusión de la ideología dominante y, por otro lado, rescata la creatividad anónima que emerge de los grandes movimientos de masas que luchan por sus derechos.

Sus proyectos

Aunque está retirado oficialmente de su principal actividad, la docencia, Alfredo no ha dejado de producir y actualmente se encuentra preparando dos libros que se publicarán en breve. El primero de ellos –admite– no surgió como una iniciativa propia: se trata de una serie de diálogos con algunos de quienes fueron primeros sus estudiantes y luego colegas –como docentes y como profesionales del diseño–, y llevará el título Conversaciones con la pipa encendida.

En homenaje a Alfredo, los docentes de su cátedra intervinieron la famosa pieza de René Magritte cuya leyenda dice «Esto no es una pipa».

El segundo libro que Alfredo tiene en preparación hace casi tres años –aunque ya está finalizado el proceso de escritura–, lleva el título que quizás resume toda su trayectoria: Arte, diseño y política. Esperamos ansiosos la publicación de estos trabajos.

Es que, además de ser un gran docente, en Alfredo Saavedra se conjugan la sensibilidad del artista, la capacidad para captar lo esencial del diseñador, y el compromiso político de un intelectual que siempre ha puesto el cuerpo, la cabeza y el corazón a favor de las causas populares, nacionales y democráticas.

Alfredo ha recibido numerosos premios a lo largo de su inmensa trayectoria. Sin embargo, no hay nada que lo honre más que haber puesto sus conocimientos a favor de las luchas populares, como lo demuestra en esta última parte de la entrevista.

Al finalizar nuestra visita a su casa, Alfredo nos mostró su estudio. Y recorriendo su biblioteca se detuvo en un libro, que según él fue fundamental para su cátedra en la FADU: El mundo como proyecto, de Otl Aicher; y nos dijo: “A mis alumnos yo siempre les propongo el reverso de esta idea: diseñar el proyecto del mundo”.


Fotos: Dardo Fabián Flores

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1 comentario

Ana Maldonado abril 27, 2021 - 1:57 pm

Excelente entrevista a Alfredo Saavedra, una sola vez participé de una clase que brindó en el taller de Diana Dowek, queda registrado en la memoria, gracias.
Felicito a Horacia Micucci por la claridad en definir porqué es de urgente necesidad tener nuestra vacuna.

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